(Para todos los cursos a mi cargo)
Solo cuando la lectura constituya una necesidad sentida `por grandes sectores de la población, y esta población considere que la lectura puede ser un instrumento para su beneficio y sea de su interés apropiarse de ella, podremos pensar en una democratización de la cultura escrita (Silvia Castrillón, 2004).
Este programa se inscribe en el marco de la nueva Ley de Educación Nacional Nº 26.206 (LEN) y, más específicamente, en su correlato en el ámbito provincial, la Ley de Educación de la Provincia de Buenos Aires Nº 13.688 (LEP).
El Diseño Curricular (DC) para la Escuela Secundaria (ES) propone un nuevo enfoque a la llamada “enseñanza de la lengua y la literatura”.
El nuevo DC hace frente a aspectos que, desde aquí, se han considerado centrales ya desde las épocas de la Ley Federal de Educación (LFE) en lo que respecta a la enseñanza de la Lengua y la Literatura: la lengua es solo un componente de una práctica mayor que es el lenguaje, y la Literatura es un arte que debe ser tratada como tal.
Desde esta perspectiva, la metodología de trabajo que se privilegia es la de Taller, dado que esta permite el contacto fluido y sin restricciones del alumno con el arte. Se trata de llegar a una aproximación reflexiva sobre los tópicos que han atravesado la historia de la humanidad y que trascienden la historia de civilizaciones y comunidades. La Literatura es la expresión de los enigmas, cuestionamientos, angustias, problemas que anidan en lo atávico del ser desde que el hombre comenzó a interactuar con la naturaleza en su conjunto.
A partir de esta premisa, la selección de autores y textos que componen este programa se ha realizado atendiendo a la universalidad de los temas. Se privilegian los grandes autores y las obras fundantes en función de que algunos de nuestros alumnos no volverán a encontrarse, tal vez, con la posibilidad de un acercamiento a la gran Literatura universal, y en especial, a la argentina e hispanoamericana.
Objetivo general
Fortalecer la centralidad de la lectura y la escritura, como condiciones básicas para la educación a lo largo de toda la vida (Especificado en la Ley 26.206 de Educación Nacional con respecto a la práctica lectoescrituraria).
Expectativas generales de logro
Se espera que los alumnos/as:
• Se apropien del circuito del lenguaje y se desempeñen como usuarios reflexivos y críticos, en todas sus manifestaciones;
• Se apropien del patrimonio cultural que suponen el acercamiento, la lectura y el análisis crítico de los clásicos de la literatura universal y de aquellos no canónicos pero relevantes en los ámbitos nacional y latinoamericano;
• Interpreten y produzcan textos de distintos géneros y formatos con el fin de ser sujetos activos de y responder a las demandas de la vida social en tanto ciudadanos;
• Adquieran una actitud analítica y crítica sobre las producciones de las distintas esferas de la actividad humana, en especial, los medios masivos de comunicación, la política y el arte;
• Ejerzan control y monitoreo permanente sobre sus propios quehaceres lectoescriturarios y su actividad interpretativa y reflexiva;
• Expresen y defiendan sus opiniones y creencias en el marco del respeto y la comunión con la otredad.
Criterios de Evaluación
La LEN señala:
Hay que plantear indicadores claros y explícitos a la hora de evaluar (…), cuando haya una calificación –parcial o final- debe establecerse con claridad cuál será el criterio para la aprobación o no (se trata de un derecho de los alumnos). (…). En este sentido, es esperable que para que esa decisión sea tomada con la mayor justicia posible, se consideren los progresos que cada alumno/a pudo realizar a lo largo del proceso de aprendizaje. También es importante ofrecer una alternancia metodológica: situaciones de coevaluación (que los alumnos socialicen sus producciones y se critiquen mutuamente), heteroevaluación (que la socialización de los textos orales y escritos sea en conjunto y en franco debate) y autoevaluación (que el alumno se familiarice con la autocrítica y con el arduo trabajo de la reescritura y la reelaboración permanente), con el propósito de tender progresivamente a la autonomía del alumno/a (DC, 2006: 213).
La metodología evaluativa de esta asignatura se despliega en consonancia con esta propuesta de la LEN:
Criterio e Indicadores
El parámetro adoptado desde este espacio a la hora de calificar es la observación del desempeño mostrado por el alumno. Se entiende por “desempeño” el nivel de compromiso con las tareas y el grado de participación activa en el desarrollo del proceso enseñanza-aprendizaje. Para ser aun más específicos, los indicadores pueden ser sintetizados como los siguientes:
1- Convivencia, Trabajo y Materiales
¿El alumno propicia o altera el respeto y la convivencia pacífica con el grupo?, ¿El alumno trabaja en clase?, ¿Tiene sus materiales cuando se los solicita?, ¿Lleva sus lecturas al día? Con respecto a estos ítems, es indispensable dejar en claro que, por la modalidad de la propuesta de la LEN y por el grado de identificación que mantengo con este proyecto, el material de trabajo –cuentos y/o novelas, textos teóricos, libreta o cuaderno de apuntes del alumno, y lápiz o lapicera para escribir- es indispensable en todas y en cada una de las clases. La ausencia de los materiales de trabajo dificulta y, en algunos casos, impide el desarrollo de la clase.
2- Tipo de trabajo o propuestas
¿El alumno responde a las propuestas de trabajo? En caso de no estar de acuerdo con las propuestas realizadas por la docente o por el grupo, ¿propone alternativas que lo motiven o lo comprometan desde sus propios intereses y criterios? ¿Sus aportes son relevantes o solo son estrategias distractoras de la atención del grupo? ¿Enriquece el programa propuesto con nueva bibliografía o con investigaciones realizadas en forma personal?
3- Plazos de entrega
Los plazos de entrega de los Trabajos Prácticos, en lo que a mí respecta, son bastante flexibles por varias razones: por la complejidad de los mismos, por las características propias del sujeto adolescente típico del nivel secundario –características que nunca desatiendo-; y, en muchos casos, por motivos de índole puramente laboral. Las consignas de Trabajo son presentadas y los alumnos “tendrán que recordar” que, al menos veinte (20) días antes del cierre de los trimestres, deben presentar todos los trabajos que adeudan. Por esta “flexibilidad”, en algunos casos, me veo obligada a retrasar la devolución. No obstante esto, al momento del cierre de los trimestres, si los trabajos que se solicitaron no están presentados, se considerarán desaprobados.
4- Alternancia metodológica
¿El alumno entrega sus trabajos cuando se vencen los plazos? En caso de no realizar o no entregar alguno de ellos, ¿justifica y propone un nuevo plazo de entrega con el tiempo necesario para la corrección y el cierre de notas?
En caso de desaprobar trabajos, el alumno ¿propone reelaborarlos? En caso de que el alumno considere que los temas o las consignas propuestas “lo superan”, ¿propone alguna alternativa?
5- Calidad de los Trabajos Orales y Escritos
Se evalúa el progreso del proceso enseñanza-aprendizaje, en primer término. Esto significa que, de acuerdo a las características particulares de cada individualidad, las producciones suponen un crecimiento progresivo en su calidad y su profundidad. Se desprende que la calificación numérica de los Trabajos no responde a un mero esquema estadístico a aplicarse, en forma homogénea, a todos los alumnos por igual. El proceso enseñanza-aprendizaje no puede ser experimentado y “vivenciado” de la misma forma y con la misma intensidad en todos los casos.
En segundo lugar, se evalúa el grado de compromiso asumido por el alumno al momento de la realización de su tarea. En este aspecto, se incluyen sub-indicadores del tipo: despliegue de los contenidos teórico-metodológicos desarrollados en clase, elaboración de argumentos y exposición de información que demuestre un trabajo consciente y comprometido y relación -con otros textos, con otros autores o con otros temas- que muestre el grado de reflexión personal realizada por el alumno.
En tercer lugar, se evalúa el grado de adecuación de la presentación de los trabajos: adecuación de los contenidos y la elaboración conceptual y la reflexión sobre los mismos, así como la adecuación del vocabulario y la expresión.
Los textos escritos -y dentro de los límites de posibilidades del alumno- se prefiere que los trabajos sean presentados en forma digitalizada, en hoja tamaño A4, con interlineado 1.5, tipografía Times New Roman 13/14 (aclaro que este número de tipografía no es el que se usa comúnmente, lo pido por razones personales), color negro y texto justificado en márgenes predeterminados (o 2,5), aunque los trabajos realizados “a mano” no serán rechazados. Los trabajos deberán tener nombre, apellido y curso al que pertenece el alumno en el margen superior de todas las páginas. Se ruega al alumno no entregar el trabajo en carpeta ni en folio, sino tan solo abrochado en el vértice superior izquierdo.
6- Calidad del Desempeño integral de la alumna/del alumno
Los trabajos parciales son evaluados de acuerdo a los indicadores detallados arriba. Se recuerda a los alumnos que la evaluación es parte del proceso de enseñanza-aprendizaje. Por lo tanto, la nota del trabajo no es más que un indicador más del nivel alcanzado en él. En todos los casos, si el alumno supone que puede alcanzar un nivel más alto, puede rehacer su trabajo y volver a entregarlo. En el caso de que la segunda (o tercera, o cuarta, etc. ya que puede rehacer el trabajo cuantas veces necesite para alcanzar la meta que desee) entrega supere a la primera, se tomará en cuenta la nota del trabajo mejorado.
A la hora de la calificación final –trimestral y anual-, el alumno es evaluado en consonancia con los indicadores detallados arriba. Esto significa que la calificación que hayan obtenido en los Trabajos Prácticos no es el único indicador ni, desde ningún punto de vista, el parámetro que define el “puntaje” que reciben la alumna/el alumno en el boletín. El Trabajo Práctico, de acuerdo a esta propuesta, es solo un elemento más que responde a un conjunto de expectativas de logro, que ya ha sido detallado, y elaborado atendiendo a un objetivo central: la formación de un sujeto capaz de abordar la producción e interpretación de textos de los ámbitos del arte, la ciencia y la mediatización, además de responsable y crítico de sus propias prácticas lectoescriturarias.